JACOB, GEORGINA V. C/ SILVA ADRIANA Y OTRA S/ ORDINARIO
La Cámara de Entre Ríos revocó la sentencia de primera instancia y condenó a las demandadas a pagar 200.000 pesos por daños a la paciente. La decisión se fundamenta en que la falta de información adecuada vulneró derechos de autodeterminación y autonomía del paciente.
- Quién demanda: Georgina Jacob
¿A quién se demanda?
Dra. Adriana Silva y Cen Salud S.R.L.
¿Cuál es el objeto del reclamo?
Daños y perjuicios por mala praxis médica, daños materiales, extrapatrimoniales, estéticos y daños futuros.
¿Qué se resolvió?
La Cámara revocó el fallo de primera instancia y condenó a las demandadas a pagar 200.000 pesos por daño moral, en forma solidaria, además de intereses y costas. La sentencia consideró que la omisión de informar adecuadamente privó a la paciente de su derecho a decidir y se configuró un daño extrapatrimonial.
¿Cuáles son los fundamentos principales?
La sentencia señala que si bien la lesión urétero-vaginal es una complicación natural de la cirugía, la omisión del deber de información y obtención del consentimiento informados vulneró derechos constitucionales y convencionales de la paciente. Se valoró que la Dra. Silva no proporcionó alternativas de tratamiento ni explicó los riesgos, privando a la actora de la posibilidad de decidir y aceptar o rechazar la intervención. La falta de consentimiento informado configura un daño moral, cuya reparación se fija en 200.000 pesos, considerando la pérdida de chance y el sufrimiento por las complicaciones no advertidas. La valoración de la prueba pericial y la experiencia médica fundamentan que la conducta de la médica fue censurable por omisión, no por mala praxis en la técnica. La responsabilidad de la prepaga se extiende en la misma línea, por no haber garantizado una adecuada atención ni informar sobre riesgos y alternativas.
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