BARROSO AXEL LUIS POR: ENCUBRIMIENTO

¿Qué se resolvió en el fallo?

El actor, en este caso la Fiscalía, promovió la condena por el delito de encubrimiento contra el imputado. La sentencia apelada lo condenó tras un debate oral, basándose principalmente en testimonios policiales y de vecinos que indicaban que la bordeadora sustraída fue hallada en el domicilio del imputado. La defensa interpuso recurso alegando valoración probatoria arbitraria, falta de fundamentos sólidos y la existencia de dudas razonables, argumentando que la prueba no era suficiente para justificar la condena. La Cámara, tras analizar los agravios, concluye que la valoración de la prueba por la sentencia apelada fue arbitraria y que la evidencia reunida no permite eliminar la duda razonable respecto a la responsabilidad del imputado. La Cámara revoca la condena y dispone su absolución, sosteniendo que la prueba no alcanza a demostrar, con el grado de certeza necesario, la participación del procesado en el hecho. Fundamentos principales: "la valoración de lo que los dichos de los testigos generan en el Juez que recibió esas declaraciones en audiencia oral, pública, contradictoria e ininterrumpida, queda reservado para el magistrado de la instancia", destacando que la revisión casatoria es limitada y que "la valoración de la prueba por parte del tribunal de primera instancia resulta soberana, siempre que no exista arbitrariedad o contradicción con reglas lógicas o científicas". El tribunal señala que "no se cuenta con evidencia que permita determinar en forma explícita que el imputado recibió la cosa, la conocía o que tenía obligación de saber su origen ilícito". Añade que "existen dudas razonables que impiden alcanzar el grado de convicción necesario para desvirtuar el principio de inocencia y justificar una condena".