SAKAIDA VIVIANA MARIA y otro/aC/ SUAREZ JAVIER VICTOR S/DAÑOS Y PERJ.AUTOM. C/LES. O MUERTE (EXC.ESTADO)

¿Qué se resolvió en el fallo?

La demanda fue promovida por Viviana María Sakaida y Carlos Enrique Cabrera contra Javier Víctor Suarez, debido a un accidente ocurrido el 7 de diciembre de 2010, en el que la menor Alejandra Cabrera fue embestida por el vehículo conducido por el demandado, falleciendo posteriormente. La parte actora reclamó daños y perjuicios en base a la responsabilidad objetiva del demandado por circulación imprudente y negligente. La aseguradora Liderar S.A. reconoció la póliza de responsabilidad civil con un límite de $90,000, y negó la responsabilidad en los hechos, alegando que el vehículo circulaba respetando las normas y que la menor irrumpió súbitamente en la vía. La causa penal fue desestimada por insuficiencia de pruebas, pero en sede civil se consideró que el evento tuvo carácter de responsabilidad objetiva del demandado, en un 50% de responsabilidad, por circulación a gran velocidad, fallas en el sistema de luces y estado irregular de los neumáticos del vehículo. Además, se analizó la conducta de la menor, concluyendo que su acción de cruzar la calle en horario nocturno contribuyó en la causalidad del siniestro. La sentencia determinó, en base a la responsabilidad concurrente, la obligación del demandado de indemnizar a los actores por daños materiales, daño psíquico y moral, incluyendo la pérdida de la vida, valorando la muerte de la menor y la frustración de ayuda futura. Se rechazaron los planteos de inconstitucionalidad del límite de cobertura del seguro y la responsabilidad de la aseguradora, estableciendo que las condiciones del contrato y las normas vigentes al momento del daño regulan la responsabilidad del asegurador. Se aplicaron intereses del 6% anual desde la fecha del hecho y actualización por IPC. La sentencia condenó al demandado y a la aseguradora en las sumas de aproximadamente $25,7 millones a Sakaida y $23 millones a Cabrera, con costas a la demandada. FUNDAMENTOS PRINCIPALES: “El principio de responsabilidad objetiva que emana de la normativa citada pone en cabeza del demandado la carga de la prueba de las causas que justifiquen el desplazamiento de la responsabilidad que le corresponde en su carácter de dueño o guardián de la cosa riesgosa... La conducta de la menor, en horas nocturnas y en horario de juego, fue un factor contribuyente en la causalidad del accidente, pero no exime totalmente de responsabilidad al conductor por fallas en el sistema de luces y estado irregular del vehículo. La culpa del menor, en su corta edad, no puede ser imputada en tanto tal, pero su acción contribuyó al siniestro en una proporción que se valúa en un 50%.” “Respecto a la responsabilidad del asegur