GONCEBAT RICARDO ABELINO C/ ACOSTA FERNANDEZ OLGA LILIAN S/ DESALOJO FALTA DE PAGO
La Cámara de Apelaciones en lo Civil y Comercial de San Isidro confirmó la sentencia de primera instancia que hizo lugar a la demanda de desalojo, rechazando los agravios de la demandada y sosteniendo la validez del contrato de locación y la calidad de locador del actor.
¿Qué se resolvió en el fallo?
La parte actora, Ricardo Abelino Goncebat, promovió una acción de desalojo contra Olga Liliana Acosta Fernández, solicitando que sea desalojada del inmueble ubicado en Benavidez, Tigre. La sentencia de grado rechazó la excepción de falta de legitimación activa y declaró que Goncebat tenía la calidad de locador, por lo que procedía el desalojo. La recurrente alegó que no era propietaria, que no acompañó poder suficiente y que existía una sucesión testamentaria pendiente en la que sería heredera. El tribunal analizó la documentación y la prueba pericial caligráfica, concluyendo que Goncebat acreditó su calidad de locador y que la donación a su hija y la titularidad registral respaldaban su legitimación. Además, rechazó los planteos relacionados con la sucesión y la propiedad, señalando que no se acreditó la condición de copropietaria ni la validez de los instrumentos que la demandada cuestionaba. La Cámara reafirmó la validez del contrato y la calidad del actor, dejando firme la sentencia de primera instancia. Se rechazaron los agravios relacionados con la prueba y la validez de los instrumentos públicos, y la cuestión de la sucesión no modificaba la legitimación activa.
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