GODOY LAUREANO LUIS Y OTRO C/ CACERES VIDAL Y OTRO S/ DESPIDO
El tribunal declaró la perimida de la instancia por inactividad de la parte actora en un proceso por despido. La decisión se fundamentó en la conducta procesal de desinterés del actor, que obstaculizó el impulso del trámite judicial, y en la normativa que regula la caducidad en el proceso laboral.
¿Qué se resolvió en el fallo?
El actor, Godoy Luis Ramón Godoy Laureano Luis, promovió demanda contra Caceres Vidal y Gusto Lanati, solicitando una indemnización por despido de $52.540. La causa fue intimada a la actora para que active el procedimiento, pero no atendió dicha intimación, lo que llevó a que los autos pasaran a resolución por decreto. El tribunal consideró que la caducidad de la instancia en el proceso laboral es una medida excepcional que procede cuando la conducta procesal de las partes obstaculiza el impulso del proceso, y que en este caso se evidenció esa conducta por la inactividad del actor. El tribunal hizo efectivo el apercibimiento y declaró la perimida de la instancia, con costas a cargo del actor, fundamentando que no cumplió con la intimación de reactivar el trámite, lo que evidencia un total desinterés en continuar con el proceso. La resolución se fundamentó en los arts. 11, 27 de la Ley 15.057, arts. 41 y 42 del CPCC, y en la jurisprudencia y normativa aplicable al proceso laboral, destacando la necesidad de mantener la actividad procesal para evitar la extinción del proceso por inactividad.
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