IÑIGUEZ CARLOS CESAR C/ BAUSTIL ESTUDIO ARQUITECTONICO SA. Y OTROS S/ DESPIDO
El Tribunal del Trabajo declaró la caducidad de instancia en un proceso por despido, debido al abandono del trámite por parte del actor. La medida se fundamentó en el incumplimiento del deber de impulso de la parte actora, tras la intimación de producir actividad útil. La costas se impusieron a la parte actora con beneficios de gratuidad.
¿Qué se resolvió en el fallo?
El actor, IÑIGUEZ CARLOS CESAR, promovió una demanda por despido contra BAUSTIL ESTUDIO ARQUITECTONICO SA. Y OTROS. La causa fue declarada extinguida por caducidad de instancia, dado que la parte actora no impulsó el proceso tras la intimación realizada por el tribunal. La jueza Prado argumentó que la caducidad constituye una medida excepcional que requiere la constatación del desinterés manifiesto de la parte interesada, y que en autos se verificó dicha situación, ya que la actora guardó silencio y no realizó acto alguno después de la notificación. Se impusieron costas a la parte actora, con beneficio de gratuidad, y se reguló honorarios profesionales con base en el monto de la demanda, ajustados a la naturaleza del trabajo y a la trascendencia de la resolución. La decisión fue suscripta en La Plata, con fundamento en los arts. 11 y 12 de la ley 15.057 y en jurisprudencia de la SCBA que respalda la interpretación restrictiva de la caducidad.
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